Los estacioneros, los transportistas y los productores agropecuarios levantaron la voz en distintos puntos del país para alertar sobre la falta de gasoil en un momento clave para el balance cambiario del país. En pocos días empieza la recolección de la cosecha más importante del año, la de soja y maíz, y tanto minoristas como mayoristas se ven obligados a fijar cupos para la venta.
Denuncian desabastecimiento de gasoil, a pocos días de iniciar las cosechas de soja y de maízLa Argentina no produce gasoil suficiente como para abastecer al mercado interno y depende parcialmente de la importación de ese combustible cuyo precio internacional se disparó como consecuencia de la guerra en Ucrania. Según el sector de estacioneros, eso lleva a las petroleras a desabastecer al mercado porque el precio en surtidor no cubre el costo de importarlo.
El campo argentino tendrá un gasto extra de gasoil de $ 10.500 millonesLas dudas respecto del abastecimiento de gasoil amenazan con complicar la cosecha de soja y maíz, la más voluminosa en términos de ingreso de divisas al país a través de las retenciones a las exportaciones, en días en los que el Banco Central busca reforzar sus alicaídas reservas internacionales.
Una de las primeras organizaciones en advertir sobre la gravedad de la situación fue la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac). “Tras el incremento de febrero (9,76%), y en un contexto de fuertes tensiones en el mercado internacional, el precio del combustible ha registrado a partir de principios de marzo nuevos y pronunciados aumentos en el costo del gasoil”, señaló la cámara en un comunicado.
“Hay un problema de desabastecimiento. Hemos llegado a un punto en que está por empezar la cosecha y todas las estaciones de servicio están poniendo cupo”, afirmó Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de los Hidrocarburos (Cecha).
A días de que los productores de trigo y maíz empiecen a demandar gasoil para las maquinarias que se encargan de la cosecha y para transportar la producción a puerto, el campo ya teme un cuello de botella. Y afirman que demoras en la cosecha puede perjudicar a los cultivos y hacer perder rendimiento a sus producciones.